La Escuela Chilena de Terapia Floral sustenta su área educativa a través de las prácticas clínicas que realizan los Terapeutas Florales formados en nuestra institución. Por este motivo se creó el departamento de Vocación y Servicio Social, que tiene por objetivo apoyar el proceso de formación terapéutica del alumnado bajo las habilidades clínicas, pero también valóricas.
Las prácticas van dirigidas a las Redes Educativas de la Región Metropolitana y se realizan bajo la consigna “Práctica Clínica Responsable” (P.C.R), inspirado por el legado de Edward Bach, quien dedicaba la Terapia Floral “a todos aquellos que sufren y padecen”.
Las prácticas de Acción Social Escolar se realizan año a año y se ejecutan bajo la regulación de un Protocolo Terapéutico, en el que se garantizan acciones e intervenciones clínicas responsables que protejan al niño en la situación especial que vive y se desarrolla, otorgando así el reparo que necesite en la desarmonía emocional que vive.
Como Escuela Chilena de Terapia Floral nos basamos en los lineamientos entregados por Edward Bach, lo que significa que nuestros valores están sustentados por el amor y la esperanza hacia quienes padecen y sufren. Por este motivo, la salud emocional de las personas es nuestro motor de vida y lucha en nuestra escuela; “poniéndonos la camiseta” con el contexto de vulnerabilidad social que vive gran parte de nuestro país.
Nuestra institución, se preocupa de crear lazos importantes, basados en el compromiso indisoluble con todos nuestros alumnos o pacientes. La idea es que todos avancemos por el hermoso camino de sanación del dolor con el apoyo de las Esencias Florales, las cuales son el instrumento de sanación y aprendizaje para todo el que la necesite.
El alumno de nuestra institución juega un rol fundamental al participar de la Misión y Visión que nuestra escuela estimula y potencia en cada conocimiento, la cual pone en práctica por medio de la “Experiencia de Aprendizaje, basada en Sabiduría Emocional”.
Para esto, se cuenta con 3 elementos claves que se desarrollan por el conocimiento floral y social que adquiere el alumno, estos son: Paciente-Alumno-Esencia Floral cada uno de los cuales influye entre si.
Para los alumnos interrelacionar estos elementos permite construir no sólo un espacio de conocimiento y lealtad floral entre ellos, sino que también un vínculo con el paciente que pasa a ser un lazo de compañía basado en el valor de la solidaridad y misericordia permitiendo facilitar la acción floral.
Tiene relación a las metas que nos identifican como escuela y que sustentamos a través de estas acciones:
Eje Vocación del Terapeuta en Práctica: Apuntado a generar orientaciones vocacionales necesarias a activar y potenciar en el terapeuta en formación.
Eje Habilidades Terapéuticas & Valóricas: Orientado a desarrollar e integrar las habilidades y virtudes del terapeuta bajo los valores que establece nuestra Escuela a través de nuestra misión y visión.
Eje Servicio Social en Vulnerabilidad: Ir en pos de ayuda solidaria y compasiva hacia los pacientes, más allá de la atención floral, incluyendo espacios de talleres semestrales a niños, construcción de una canasta fraterna incorporando ayuda en mercadería para los padres de nuestros pacientes; entre otros.
Eje Orientación Personal para el Alumnado: Orientación consistente en contención y apoyo a nivel personal, en vista de los diversos procesos personales que convergen en el desarrollo del programa académico.
El departamento tiene como objetivo entregar el apoyo y seguimiento correspondiente a cada alumnado ya sea que esté en práctica o estudiando, comprendiendo que cada persona lleva consigo procesos personales que, además van evolucionando a medida que avanza el camino del aprendizaje floral y el del desarrollo de las prácticas. Por este motivo, la entrega educacional y la ayuda a nivel social transcienden nuestras bases en el ejercicio terapéutico, que sin duda es la construcción de lo que nos dejó Bach.